A la audiencia española le gustan las series familiares. No hay duda. Sólo hay que mirar los índices de audiencia de series como Los Serrano, Cuéntame, Aquí no hay quien viva o, en su día, Médico de familia o Farmacia de guardia. Escribía estos días sobre Los Serrano y Cuéntame, en concreto, sobre la recepción de estas dos series contemporáneas por la audiencia española y las particularidades que las diferencian de otras producciones televisivas. Os paso algunas cuestiones que me parecen interesantes.
En concreto, al público de nuestro país le atraen los temas típicamente españoles que se exponen, en el caso de Los Serrano, en forma de humor, y en el caso de Cuéntame, recreando una España de épocas pasadas. Respecto a Los Serrano, merece la pena dar a concocer la curiosa relación que establecen los espectadores entre “lo español” y “lo cutre” y poco refinado, pero no como motivo de vergüenza para ellos, sino de disfrute. Específicamente, destacan de los personajes la representación de los típicos defectos de los españoles con los que se ríen abiertamente.
Sobre Cuéntame, la audiencia se entretiene viendo la buena recreación de unos tiempos pasados, vividos por gran parte de la audiencia y queridos por casi todos. Más que el tinte de humor, la atracción se tiñe de nostalgia, en muchos casos, por el recuerdo de la feliz infancia vivida aquellos años. Esta evocación que hace la serie de esa época se consigue gracias a los excelentes parámetros de producción, en concreto, a la ambientación de los decorados, entre otros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario